Antecedentes históricos
de la comunidad afrodecendiente EN MÉXICONUESTRA HISTORIA COMO AFROMEXICANOS
En México existen personas y comunidades descendientes de mujeres y hombres provenientes de distintas regiones de África, que forman parte de la Nación.
La mayoría de ellas arribaron como resultado de procesos de esclavización durante el periodo virreinal (1521-1821) y otras, migraron, por distintas causas, en el siglo XIX y en el transcurso de los siglos XX y XXI. Conocidas histórica y coloquialmente como “negras” o “morenas”, a partir de los procesos de conquista y colonización que convirtieron a las personas de distintas regiones del continente africano en “negras”, y más recientemente como afrodescendientes en México o afromexicanas, estas poblaciones han sido ignoradas, invisibilizadas y excluidas de la atención del Estado, enfrentando situaciones de discriminación y racismo.
Es importante aclarar que si bien existe una reflexión y un debate actual sobre el uso de uno de los términos en México, existen precedentes internacionales, nacionales y locales del empleo de los términos afrodescendiente y afromexicano/a, como los más pertinentes para denominar a estas poblaciones.
Por razones históricas, la mayoría de los pueblos y comunidades de origen africano en México se visibilizan hoy en día, fenotípica y culturalmente, en las costas de los Estados de Guerrero y Oaxaca, Veracruz y Coahuila, al ser en estas regiones en donde las poblaciones afromexicanas históricas han tenido mayores posibilidades de desarrollar sus culturas y procesos de identificación.
Sin embargo, descendientes de personas africanas que llegaron durante la época colonial siguen estando presentes en casi todos los estados de la República Mexicana. Con las tropas de conquista, llegaron las primeras personas del continente africano a México, se sabe que algunas fueron gratificadas con tierras y encomiendas por su participación en la guerra.
No obstante, la gran mayoría, arribó esclavizada proveniente fundamentalmente de África Occidental, de la región de Senegal, Gambia y de África Central, Angola y el Congo, así como de otras regiones de África Oriental.
Miles de mujeres, hombres, niñas y niños, que estudiosos como el antropólogo Gonzalo Aguirre Beltrán han calculado en 250,000, llegaron a los puertos de Veracruz, Campeche y Acapulco, para ser distribuidos en prácticamente todo el territorio de lo que entonces era la Nueva España. Según cifras de historiadores en varias etapas del periodo virreinal y en diversas regiones, las personas africanas y sus descendientes ocuparon el segundo lugar en densidad de población de la sociedad novohispana después de los indígenas.
Por ejemplo, cifras demográficas reveladas hace tiempo por Gonzalo Aguirre Beltrán muestran la importancia de las personas afrodescendientes en la Nueva España. En 1570 del total de la población 98.7 por ciento era indígena, 0.2 por ciento europea y 0.6 por ciento africana. Hacia mediados del siglo XVII las personas indígenas representaban un 74.6 por ciento, las africanas y sus descendientes el 2 por ciento mientras que los europeos el 0.8 por ciento.
La drástica caída demográfica de la población indígena por las consecuencias de la guerra de conquista, los malos tratos, pero sobre todo las epidemias por las enfermedades traídas de Europa, mermaron de manera significativa la mano de obra que los españoles necesitaban para sus nuevas empresas. Ello y la prohibición de esclavizar a los indígenas a partir de la controversia de Valladolid y la creación de las Leyes Nuevas fueron las principales causas que propiciaron la demanda de mano de obra esclavizada desde África.
Población afromexicana en Veracruz
Al igual que la Costa Chica, el estado de Veracruz tiene una serie de pueblos negros, notablemente los pueblos con nombres africanos como Matamba, Mozambique y Mozomboa, así como Chacalapa, Coyolillo, Yanga y Tamiahua. El pueblo Coyolillo, municipio de Actopan, organiza un Carnaval anual con danza afro-caribeña y otros elementos africanos, dicho festival tiene más de 150 años y fue creado por afrodescendientes en condición de esclavitud.
YANGA EN LA HISTORIA MEXICANA
La historia de la población africana y afrodescendiente en México es aún desconocida para gran parte de la sociedad nacional, pues aunque numerosos investigadores se han dado a la tarea de difundirla, queda todavía un mundo de interrogantes por resolver en cuanto a los aportes socioculturales que dicha población legó para la configuración del México contemporáneo.
La historia del municipio de Yanga en el estado de Veracruz es un ejemplo de ello; muestra de resistencia pero también de la capacidad de agencia (entendida como aquella que tienen los grupos sociales para tomar sus propias decisiones) que desarrollaron los africanos esclavizados frente al sistema virreinal. En el discurso popular, se afirma que Yanga es el “primer municipio libre de América”, debido a su temprana fundación a inicios del siglo XVII (doscientos años antes que el proceso de independencia de México) por obra de un cimarrón de origen africano. Dicha labor “libertadora” ha propiciado que algunos grupos hayan identificado a Yanga como uno de los mayores representantes de la negritud.
El nombre del municipio ha cambiado a lo largo del tiempo: primero se llamó San Lorenzo de los Negros, luego San Lorenzo de Cerralvo y finalmente Yanga, en honor a su fundador: Nyanga, un negro africano esclavizado en 1579 cuyo origen es desconocido, pues mientras unos aseguran que llegó del pueblo de los Yanga-Bara, otros están convencidos de que perteneció a la nación Bran. No obstante, estas poblaciones continuaron formando parte de la sociedad mexicana, participando activamente en varios momentos importantes de la historia nacional en este periodo.
Por ejemplo, es conocida la intervención de habitantes de la Costa Grande de Guerrero en la guerra de Independencia como parte del ejército de José María Morelos, quien a pesar de haber sido registrado como español en los archivos parroquiales, se sabe que era “mulato”, es decir descendiente de personas africanas y españolas.También es poco conocido el hecho de que Vicente Guerrero, destacado líder del movimiento insurgente y segundo presidente de México, también era descendiente de personas africanas.
No obstante, estas poblaciones continuaron formando parte de la sociedad mexicana, participando activamente en varios momentos importantes de la historia nacional en este periodo. Por ejemplo, es conocida la intervención de habitantes de la Costa Grande de Guerrero en la guerra de Independencia como parte del ejército de José María Morelos, quien a pesar de haber sido registrado como español en los archivos parroquiales, se sabe que era “mulato”, es decir descendiente de personas africanas y españolas.También es poco conocido el hecho de que Vicente Guerrero, destacado líder del movimiento insurgente y segundo presidente de México, también era descendiente de personas africanas.
Como resultado de los procesos de invisibilización ya señalados que han excluido a las personas, comunidades y pueblos afromexicanos de los libros de historia, los museos, las estadísticas oficiales y en general del discurso público, la gran mayoría de las personas y poblaciones afromexicanas ubicadas en distintas regiones de México, desconoce su pasado como comunidad o pueblo. Sólo en regiones en donde, por causas históricas, su presencia es más visible fenotípica y culturalmente como en la Costa Chica de Guerrero y Oaxaca, Veracruz o Coahuila, se han desarrollado procesos de recuperación de la historia propia, de valoración de la cultura y reivindicación de sus derechos como personas, comunidades y pueblos con características particulares.